Las historias, leyendas y mitos sobre el origen de la coctelería, son abundantes y muy diversas.
Unos lo sitúan en Nueva York, a principios del siglo XIX, donde un periódico neoyorkino definió por primera vez la palabra cocktail como “un licor estimulante, compuesto por algún tipo de azúcar, agua y especies”.
Sobre la traducción literal de la palabra, “cola de gallo”, hay muchas versiones. Desde que se le proporcionaba la bebida a los gallos para que mantuvieran su fuerza y violencia durante las peleas, hasta que algunos taberneros, removían la mezcla con raíces de hierbas que recordaban la cola del animal.
La respuesta más clásica de todas ubica su origen en Nueva Orleans, donde el vocablo derivó del francés “coquetel”, (recipiente utilizado para servir bebidas).
Aquí en España, y como ya publicamos en nuestras redes, con mucho orgullo por la parte que nos toca, fue el escritor Benito Pérez Galdós , quien escribió por primera vez sobre estas “bebidas modernas”.
Sea como sea, la coctelería, es una práctica que ha ido transformándose y desarrollándose hasta conseguir un estatus. Hoy en día, sería imposible contabilizar la cantidad de cócteles, y versiones de clásicos que se realizan al rededor del mundo.
Pero sí podemos afirmar, que se ha convertido en un Arte donde cada profesional pone “su toque” y donde cada una de las versiones tiene como ingrediente común, LA CONSTANTE INNOVACIÓN.
La coctelería es una moda y como toda moda, es cíclica como indica este maravilloso artículo de la revista La Mala Vida sobre el resurgimiento de la coctelería Tiki.
Y aunque pueda parecer un poco masoquista por nuestra parte, escribir sobre todo esto en un momento dónde lo más seguro es permanecer en casa, queremos transmitir tranquilidad a nuestra comunidad Transformer, ¡¡¡porque en breve podremos volver a disfrutar de forma segura Y MUY CÓMODA!!!
¡Salud!
¡Interesante!
Gracias!
¡Salud!
Excelente!!